Aprende a dominar la ciencia de encontrar el momento adecuado

Las librerías están llenas de libros sobre cómo hacer todo tipo de cosas, pero ninguno explica cuándo hay que hacerlas. La mayoría de las decisiones que tomamos acerca de cuándo llevar a cabo una acción están basadas en mera intuición. A partir de una investigación multidisciplinaria, Daniel H. Pink nos demuestra que elegir el momento adecuado para cada cosa es toda una ciencia. Si quieres dominarla y sacarle el máximo partido a tus decisiones, ‘¿Cuándo? La ciencia de encontrar el momento preciso’ es tu libro.

Dividir el tiempo en días

El día (con sus 24 horas) es la principal forma que tenemos de dividir, configurar y evaluar nuestro tiempo. Por este motivo, es vital saber en qué momento estamos más dispuestos a emprender proyectos. Deberemos tener en cuenta que:

• Nuestro ánimo oscila durante la jornada. Según un estudio de los sociólogos Michael W. Macy y Scott A. Golder, independientemente de nuestro país de procedencia, cultura o religión, nuestro ánimo positivo sube por la mañana, decae por la tarde y vuelve a subir por la noche.

• Nuestro rendimiento varía a lo largo del día. El psicólogo alemán Hermann Ebbinghaus fue el pionero en llevar a cabo una serie de experimentos que demostraron que las personas aprendían y recordaban secuencias de sílabas arbitrarias con mayor eficacia por la mañana que por la noche, sugiriendo que nuestra capacidad cognitivas varía a lo largo del día.

• A veces somos más creativos en los momentos considerados “menos óptimos”. En su libro, Pink habla de la “paradoja de la inspiración”, que nos recuerda que la creatividad y la inspiración pueden ser mayores precisamente cuando no estamos en nuestro mejor momento.

Lo importante es que tengas claro cuál es tu mejor momento a lo largo del día (Pink ofrece en su libro un cuestionario para ayudarte). Cuando lo sepas, podrás organizar tu horario de acuerdo con tus ritmos.

Hábitos que puedes incorporar a tu rutina

Sea cual sea tu ritmo, el autor aconseja que adoptes una serie de hábitos que te ayudarán a mantener tus rutinas:

Por las mañanas:

• Bebe un vaso de agua nada más despertar para hidratar tu organismo (también tu cerebro).

• Intenta hacer ejercicio y fortalecerás tu disciplina.

• ¿Recuerdas aquello de que “el desayuno es la comida más importante del día”? Pink está de acuerdo y recomienda que lo pongas en práctica.

Por las tardes:

• Haz pausas breves para mantener la concentración y activarte. Si tienes posibilidad, mejor salir al exterior.

• Intenta no permanecer mucho tiempo sentado y camina al menos cinco minutos cada hora que pases delante del ordenador.

• Comparte tu tiempo. Pasar tiempo con gente tiene un efecto reconstituyente.

• Si tienes oportunidad, una siesta de 20 minutos puede darte un chute de energía.

No descuidar ninguna parte del proceso

Principio

Es probable que en algún momento de tu vida te hayas fijado un propósito para el año nuevo: comenzar a meditar, aprender algún idioma o ampliar tu red de contactos.La elección de la fecha para comenzar a poner en práctica tu nuevo proyecto no es casual, sino lo que los científicos sociales lo denominan “punto de referencia temporal” y lo usamos para guiarnos en el tiempo. El primer día del mes y de la semana también funcionan de la misma forma en nuestra cabeza (ya sabes, aquello de “empiezo el lunes”). Las referencias temporales nos ayudan a tener una visión panorámica de nuestra vida, a concentrarnos en nuestros objetivos y tomar mejores decisiones.

El autor utiliza el ejemplo de la escritora Isabel Allende escribió el 8 de enero de 1981 una carta a su abuelo que luego dio pie a su primera novela, La casa de los espíritus. Desde entonces, ha empezado cada novela en la misma fecha para marcar el comienzo de un proyecto nuevo.

En tu caso, a la hora de iniciar un nuevo proyecto:

• Piensa en una fecha que sea importante para ti. Puede ser tu cumpleaños, el comienzo del año o cualquiera que tenga un significado personal, y utilízala como marcador de inicio de tus proyectos.

• Visualízate a ti mismo “transformándote” para tus nuevos proyectos. Es difícil arrancar si te atascas en el pasado.

• Haz acopio de motivaciones. Seguro que el primer día estás lleno de energía, pero ¿y el trigésimo? Puede que no tanto. Por eso Pink recomienda aprovechar esos primeros momentos en que estés muy motivado para “reforzar tu liderazgo, organizar las llamadas y dominar nuevas técnicas”.

Mitad

Muchas veces es fácil comenzar un nuevo propósito, pero nuestra motivación decae cuando estamos a mitad del proyecto. Según Pink, para convertir un bajón en una remontada, debes seguir los siguientes tres pasos:

1. Sé consciente de los logros intermedios y no dejes que permanezcan invisibles.
   Para ello, puedes establecer objetivos a medio plazo y celebrarlos cuando los cumplas, así mantendrás viva la motivación. También te será de ayuda comprometerte públicamente a cumplir con tu plan. Según Pink, somos más propensos a mantener nuestros objetivos si hacemos que alguien nos pida cuentas.

2. Aprende a usar los puntos medios como estímulo y no para sentirte agobiado.
   Pregúntate, por ejemplo, a cuántas personas beneficia lo que estás haciendo o, siguiendo el ejemplo del humorista estadounidense Jerry Seinfeld, marcando una equis en el calendario cada día que cumplas con tus objetivos. El día que no tengas ánimos para continuar y eches un vistazo a una cadena de diez, treinta o cien equis,te sentirás de nuevo capaz de estar a la altura de las circunstancias.

3. Utiliza el punto medio para fijar la dirección y acelerar el ritmo.
   Haz una lista con tus objetivos, rodea con un círculo aquellos que consideres más importantes y reflexiona sobre cómo vas a conseguirlos.

Final

Solemos esforzarnos más cuando vislumbramos la línea de meta. Los finales pueden ser una fuerza positiva, darnos energía para alcanzar nuestros objetivos y ayudarnos a discernir lo importante de lo accesorio en nuestras vidas.

• Establece un plazo de entrega: te ayudará a ser más productivo.

• Intenta dar un significado a todos los finales: expresa tu gratitud por lo aprendido y párate a reflexionar sobre lo qué ha significado llegar hasta aquí.

Sincronizar y pensar en plural

Recuerda que, en muchas ocasiones, la elección del momento justo deberá tener en cuenta a otras personas, por lo que cuanto más sincronizado estés con aquellos que vayan a intervenir en el proyecto, mayor probabilidad tendrás de encontrar el timing perfecto.

Pink propone una serie de ejercicios para ayudarte a mejorar tu coordinación y sincronización con otras personas, lo que puede ayudarte a mejorar tu bienestar tanto físico como psicológico:

• Planea actividades que impliquen formar parte de un equipo, como cantar en un coro, correr con alguien o apuntarte a clases de baile con una pareja.

• Si lideras un grupo y crees que falla la coordinación entre vosotros, puede ayudarte algo tan sencillo como contar historias inspiradoras: “las historias sobre fracaso o vulnerabilidad fomentan el sentido de pertenencia”, afirma Pink.

• Otra estrategia para mantener la cohesión con el grupo es establecer ciertos rituales. Puede ser algo tan sencillo como ir a tomar algo juntos tras el trabajo los viernes.

Como ves, todo tiene su momento y no es complicado encontrarlo si pones en práctica los consejos de Daniel H. Pink. Y recuerda que a veces el paso correcto es no dar el paso: si crees que una decisión aún necesita tiempo para madurar, seguramente estés en lo cierto. Perder la motivación durante el proceso de desarrollo de un proyecto es normal, pero piensa que el desánimo tiene una vida muy corta. Inicia un plan de acción y… ¡que nada ni nadie te detenga!

Foto de WTTJ

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